El lanzamiento del Plan de Acción del Corredor Bioceánico Vial (PACBV), realizado en Santiago de Chile con la participación del presidente Gabriel Boric y autoridades de Tarapacá y Antofagasta, marcó un hito para la integración regional en América del Sur. En ese contexto, Chile confirmó que su primera gran inversión será en Jama, sobre territorio fronterizo con la provincia de Jujuy.
El Ingeniero Alfredo Simón, representante del Colegio de Ingenieros de Jujuy ante la Comisión del Corredor Bioceánico, destacó que “el Paso de Jama deja de ser un simple punto de cruce para convertirse en una plataforma logística clave del sistema sudamericano”.
Uno de los anuncios más relevantes fue la construcción de un sitio de inspección de cargas a cinco kilómetros del ACI Jama, con una inversión superior a los 11 millones de dólares, que permitirá optimizar el paso internacional, aliviar la presión sobre San Pedro de Atacama y dotar a la zona de infraestructura moderna para el comercio internacional.
“El testimonio que confirma la centralidad de Jujuy es que el Gobierno de Chile ha elegido la frontera con esta provincia para su primera gran inversión en el marco del Corredor Bioceánico Vial”, enfatizó Simón. “Es una señal clara de que Jujuy es la puerta natural hacia el Asia Pacífico”.
Además del nuevo puesto de control, el plan chileno contempla la creación de un puerto terrestre concesionado, que funcionará como centro de fiscalización y logística. Desde allí se proyecta una nueva dinámica comercial con Asia, beneficiando directamente a los productos regionales como minerales, agroindustria, alimentos con valor agregado, biotecnología y maquinaria.
Simón remarcó que Chile ya cuenta con plan, presupuesto y cronograma definido, mientras que Argentina aún debe consolidar políticas a la altura del proceso: “La integración ya no se discute, se ejecuta. Argentina necesita una respuesta ágil, coordinada entre Nación, provincias y el sector privado”, afirmó.
Entre los ejes estratégicos mencionó la infraestructura vial, conectividad digital, servicios aduaneros y nodos logísticos intermedios, junto a normativas comunes, formación profesional y estándares de control que faciliten la operatividad del lado argentino.
“Jujuy tiene todo para ser protagonista. Ahora el desafío es estar a la altura de la oportunidad histórica que representa este corredor”, concluyó el ingeniero.